miércoles, 19 de octubre de 2016

Experimento

-Observación: nuestro objetivo era probar que los niños que habían presenciado violencia doméstica en sus casas por parte de sus padres hacia sus madres al crecer copiarían estas conductas agresivas y violentas con sus madres y con sus respectivas parejas en caso de que tuviesen.
-Hipótesis: los adolescentes que han tenido una infancia donde el padre maltrataba a la madre actúan de forma violenta con su madre e incluso con su pareja.
-Variable independiente: el haber observado estas conductas agresivas de sus padres hacia sus madres cuando eran  pequeños.
-Variable dependiente: tener las mismas reacciones agresivas que tenían sus padres con sus parejas/futuras parejas o madre.
-Grupo de control: serán los adolescentes que han visto esas agresiones y más adelante en este artículo hablaremos del seguimiento que les hicimos.
-Experimento: para conseguir información y asegurarnos del entorno familiar que tuvo el niño en el pasado fuimos a la casa de la mujer y a varias terapias de grupo donde había mujeres maltratadas por sus parejas. Las pedimos que nos contasen la actual situación de su hijo con respecto a la mujer para ver si así él ya empezaba a mostrar síntomas de violencia. En este experimento decidimos evaluar adolescentes varones con una edad de entre 15 y 20 años. Todo esto del experimento fue voluntario por todas las partes.
Para comprobar esto lo primero que hicimos fue hacer un test a las madres que voluntariamente decidieron participar en este experimento. En él se incluían preguntas como:
-¿Qué edad tiene su hijo?
-¿Estaba presente cuando usted era maltratada?
-¿Reacciona de forma agresiva cuando algo no le gusta o cuando se le reprocha algo?
-Si su hijo tiene pareja, ¿sabe usted si sigue conductas agresivas?
-¿Estaría dispuesta a seguir con el experimento?
Después de haber hecho este test, escogimos a diez madres para continuar con el experimento.
Las elegidas creíamos que eran las que cumplían los requisitos para hacerlo después de haber respondido las preguntas del test.
La segunda parte del experimento era colocar cámaras en los domicilios de las madres. Luego hablamos con las madres para ver si podíamos hacer lo mismo con las novias (en caso de que las tuvieran), de las diez posibilidades que habían cinco de ellas accedieron a hacerlo ya que vivían con él (dos de los casos) y luego en los otros tres casos, la novia pasaba bastante tiempo con él en la casa de la madre de él a solas. En los otros cinco restantes, sería la madre la que llevaría a cabo la continuación del experimento.
Se realizó la instalación de las cámaras con la ayuda de un equipo de expertos, durante un mes, decidimos crear situaciones ficticias que podrían crear reacciones similares a las reacciones que tenían los padres cuando ellos estaban presentes en las agresiones.
-Demostración: cuando creamos estas situaciones ficticias todos los adolescentes reaccionaron de la misma manera, alzando la voz, queriendo tener la razón en todo y utilizando las agresiones en caso de ser necesarias. Vimos actitudes y conductas propias de violencia de género creadas en el pasado al haberlo vivido en la infancia.
-Tesis: tras un largo estudio y análisis de las grabaciones descubrimos que era así, que la hipótesis que habíamos planteado se cumplía.


                                                      Sebastián Ruiz y Jorge Vega




1 comentario:

  1. Sebas, el experimento es muy bueno, pero no están definidas las variables ni los grupos control y experimental.

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